Bajo la orden del Juez, el guía se acerca directamente a
su perro a paso normal y le da una señal acústica para colocarlo en
posición base. No hace falta quitarle el bastón acolchado al ayudante. c) Evaluación Se penalizan las faltas relativas a los criterios de
evaluación más importantes. Estos criterios son los siguientes: agarrar
rápida y enérgicamente, perseguir enérgicamente con un mordisco
tranquilo y pleno hasta la orden de "suelta", después de soltar
observar atentamente al guía. En el caso de que el perro no esté atento y/o esté
ligeramente incómodo en la fase de vigilancia, se le atribuye al
ejercicio una penalización. Si el perro no vigila atentamente al
ayudante, se le atribuyen al ejercicio dos penalizaciones. Si el perro no
vigila al ayudante, sino que se queda a su lado, se le atribuyen al
ejercicio tres penalizaciones. Si el perro va hacia el ayudante cuando éste
se está aproximando, se atribuye al ejercicio la calificación de
"insuficiente". Si el perro abandona al ayudante antes de la
orden del Juez de acercarse o da el guía una señal acústica para que el
perro permanezca junto al ayudante, se interrumpe la disciplina C. 5.- Conducción de espaldas
5 Puntos a) Una Señal Acústica de "al pie" b) Ejecución A continuación del ejercicio 4, tiene lugar la
conducción de espaldas del ayudante durante una distancia de unos 30
pasos. El Juez determina el transcurso del transporte. El guía requiere
que el ayudante vaya delante y él va detrás con su perro sin correa
observando al ayudante a una distancia de unos 5 pasos. La distancia de 5
pasos debe respetarse durante todo el ejercicio de conducción de
espaldas. c) Evaluación Se penalizan las faltas relativas a los criterios de
evaluación más importantes. Estos criterios son los siguientes: una
atenta observación del ayudante, ir al pie con precisión, cumplimiento
de la distancia de 5 pasos. 6.- Agresión por sorpresa sobre el perro en la
conducción de espaldas
15 Puntos a) Una Señal Acústica de "suelta",
"al pie" b) Ejecución Concluida la conducción de espaldas y bajo la orden del Juez, tiene lugar, sin pausa, un ataque del perro. Sin la orden del Juez y sin vacilar, el perro debe defenderse agarrando fuertemente. El perro sólo puede agarrarse a la manga del ayudante. Después de que el perro haya mordido, el guía debe permanecer de pie en el lugar actual. Cuando el Juez lo ordene, el ayudante parará. Después de que el ayudante haya parado, el perro debe inmediatamente soltar. El guía puede dar una señal acústica para "suelta" a su debido momento. Si después de la primera señal acústica el perro no suelta, el guía recibe la orden del Juez de dar una segunda señal acústica. Si el perro no suelta después de estas señales acústicas (una primera permitida y una segunda adicional), se le descalifica. |